Fraude en Bienes Raíces
Bajo la ley del estado de California, los compradores, vendedores y agentes de bienes raíces están obligados a revelar todos los hechos materiales de los que tengan conocimiento y que pudieran influir en la elección del comprador. Esto puede incluir defectos de construcción que sean de su conocimiento en el momento de la venta, problemas con el título de una propiedad y, en general, cualquier otro problema que pudiera afectar el valor de una propiedad. Esta información es incluso necesaria cuando las propiedades se venden “tal cual”. Cualquier falla en la comunicación o tergiversación de esta información sobre una propiedad inmobiliaria se considera como fraude inmobiliario.
Al igual que las demandas legales por lesiones personales, nuestro primer paso será demostrar que la otra parte tiene la culpa. Si, por ejemplo, tú compraras una casa que tuviera problemas con el título de propiedad, del cual no se te informó, podríamos probar a través de una búsqueda de títulos de propiedad que el vendedor sabía de esta información y no informó al comprador.
Si podemos desarrollar una línea de tiempo del título de una propiedad y demostrar que el comprador actual no tuvo conocimiento alguno de una línea de tiempo precisa y totalmente actualizada, habremos comprobado que no se te dio esta información y podremos avanzar con el caso. De manera similar, si el fraude que estás experimentando es una violación en el contrato, nuestro primer paso será recopilar evidencia sobre la forma en que la otra parte violó su contrato.
Como víctima de un fraude inmobiliario, podrías buscar diferentes tipos de soluciones. Estas soluciones incluyen la compensación de daños por el dinero perdido debido al fraude, daños punitivos que están destinados a ejercer una presión económica sobre el responsable, y la rescisión, que es esencialmente una cancelación de la venta. Una vez que hayamos establecido que realmente se ha producido un fraude, determinaremos cuál de estas opciones será la solución.
Mark Martinez está bastante familiarizado con la ley de bienes raíces en el sur de California. No confíes a nadie más tu caso.
